En un evento en Fusagasugá, la senadora María Fernanda Cabal llamó a defender la libertad en las elecciones de 2026 para evitar que el país siga el rumbo de Venezuela, Nicaragua o Cuba.
Fusagasugá, 5 de octubre de 2024– En un encuentro con empresarios, líderes políticos y la comunidad de la región, la senadora María Fernanda Cabal lanzó un llamado contundente sobre el futuro de Colombia. «¿Dónde está el Estado colombiano, dónde está el que nos protege?», se preguntó, destacando la importancia de las elecciones de 2026 como decisivas para evitar que el país se convierta en «un estado criminal» como Venezuela, Cuba, Nicaragua y Bolivia. «Tenemos que sumarnos, cuidar los votos, salir a elegir y proteger nuestra libertad. No hay otra opción. No hay una segunda oportunidad».
La Senadora advirtió que la situación actual de Colombia puede empeorar si no se toman acciones contundentes. «La diferencia entre antes y ahora es que antes había cuatro o cinco grupos de bandidos. Ahora hay 800 grupos ilegales que nos dejó el acuerdo de paz porque Juan Manuel Santos nos dijo que ya había acabado la guerra», afirmó, señalando cómo el acuerdo de paz no logró poner fin a la violencia en el país, sino que la fragmentó aún más.
Cabal criticó duramente al gobierno de Gustavo Petro, al cual describió como un peligro para el desarrollo del país y comparó con una «pesadilla». Según la senadora, la administración actual ha implementado políticas que solo han traído destrucción de la sociedad, impuestos, empobrecimiento, violencia y exilio. «No hay ninguna idea innovadora.
Cabal recordó cómo, durante el mandato de Álvaro Uribe, territorios como Cundinamarca, Córdoba, Cauca y otros, lograron recuperarse de la violencia y florecieron en términos de desarrollo y turismo. «Uribe rescató el país en un año. Hoy, vemos cómo se está perdiendo de nuevo», mencionó, lamentando la falta de autoridad y la vuelta de la inseguridad y la pobreza.
La senadora Cabal cerró su intervención con un llamado a la memoria y la acción, afirmando que la adversidad es la que forja el carácter necesario para transformar vidas y la sociedad. «Esta es una invitación que yo les hago, porque Cundinamarca fue un territorio esclavo de las guerrillas, lo liberó Uribe y volvió a crecer. Hoy no podemos permitir que vuelva a perderse. Que la sangre derramada no haya sido en vano», concluyó.
FIN